¿Cómo podemos ayudarlo?
Cuando el sol se estaba poniendo una tarde de viernes, una planta generadora de energía del Reino Unido perdió el vacío en una de las tres bombas de vacío de anillo líquido que se utilizan para generar energía para la red nacional. La central eléctrica funciona con carga máxima y requiere que las tres bombas de vacío estén en línea para generar energía según la demanda. Incluso la pérdida de una sola bomba podría afectar a las obligaciones contractuales de la central con la red nacional. Afortunadamente, ya tenían un plan de contingencia en marcha: contactar a NASH.
En solo tres días, la bomba pasó de estar parada en espera de reparación a estar completamente en funcionamiento, todo gracias al servicio de NASH Certified™.
La bomba se envió al centro de servicio de NASH Certified en Winsford, donde se desarmó inmediatamente y se descubrió que un rotor de segunda etapa se había roto debido a una falla en la contratuerca. El rotor dañado había desgastado un agujero en el lóbulo de la segunda etapa y había roto una válvula de retención.
El servicio de NASH Certified™ presentó un informe completo y una cotización, instaló una válvula de retención a través del centro de distribución de NASH en los EE. UU. y soldó la válvula de retención rota como respaldo. NASH utilizó un rotor y un cono de segunda etapa de su stock con sede en el Reino Unido, y se abasteció localmente de un eje.
Los ingenieros de servicio de NASH se pusieron a trabajar, repararon la bomba y la enviaron de vuelta completamente reparada el lunes siguiente, solo tres días después de haberla recibido para su reparación. NASH incluso proporcionó un informe completo, con una visión detallada de la razón del fracaso.
Este cambio rápido no se produjo por suerte, sino que requirió el trabajo en equipo, la experiencia y la infraestructura de servicios que NASH ha estado aplicando y perfeccionando durante décadas. El equipo de ventas de NASH era de fácil acceso y proporcionó una cotización rápida al cliente, e inmediatamente pidió y envió los repuestos. Los ingenieros de servicio altamente capacitados de NASH pudieron entonces ensamblar rápidamente la bomba y enviarla de vuelta al cliente.
La pérdida de una bomba habría afectado la capacidad de la estación para suministrar la energía requerida por la red nacional. Menos mal que sabían que "Si se trabaja con más inteligencia se trabaja mejor". La rápida respuesta de NASH y su servicio de alta calidad los puso de nuevo en línea en un abrir y cerrar de ojos, con una bomba completamente reparada que funciona de manera más confiable que nunca. Los clientes con sede en el Reino Unido que dependen de la red nacional no tienen por qué preocuparse. NASH siempre está listo.